divendres, 21 de maig del 2010

Pinocho



En una carpintería, Gepeto terminaba un día más de trabajo dando los últimos retoques de pintura a un muñeco de madera que había construido ese día. Y como el muñeco había sido creado con madera de pino decidió llamarle Pinocho.

Aquella noche, Gepeto se fue a dormir deseando que su muñeco fuera un niño real. Siempre deseó tener un hijo. Cuando estaba profundamente dormido, llegó un hada y viendo a Pinocho quiso premiar al carpintero dando vida al muñeco.

Al día siguiente, cuando despertó, Gepeto no se creía lo que veía. Pinocho podía moverse y hacer de todo como un niño real. Gepeto mandó a Pinocho a la escuela para que aprendiera muchas cosas.


Por el camino, Pinocho encontró unos niños malvados y siguiendo sus travesuras e ignorando al grillo les siguió en busca de aventuras. Al ver la situación, el hada le hechizó y le puso dos orejas de burro y cada vez que mintiera le creciera la nariz. Pinocho terminó reconociendo que estaba siendo malo y se fue a buscar a Gepeto. En su búsqueda se enteró que había sido tragado por una ballena.


Pinocho, con la ayuda del grillo, se fue a la mar a rescatar a su padre. Cuando estuvo frente a la ballena le pidió que le devolviera a su padre, pero en lugar de eso la ballena se lo tragó a él también. Dentro de la ballena, Pinocho i Gepeto se reencontraron i pensaron la forma de salir de allí. Hicieron una hoguera y el humo hizo estornudar a la ballena, expulsándolos de ella.

Pinocho, arrepentido de lo que había ocurrido, decidió volver a la escuela y portarse bien. Y en recompensa a sus actos, el hada le convirtió en un niño real, y fueron muy felices.

1 comentari:

  1. Un cuento entrañable.No estaría mal que completases tu cuento con un poquito de información más personal: por qué te gustaba, cuándo lo leías, si viste la película...

    Nota:7

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